Un mapa mental requiere de un mayor grado de dedicación y de ingenio, puesto que hay que saber colocar imágenes que no confundan al receptor y además acomodarlas en un sentido racional. En cambio en un mapa mental, se dan los temas y simplemente, uno solo tiene que acomodarlos de manera jerárquica.
Como lo dijimos, un mapa mental se vale de las imágenes y los colores, en cambio un mapa conceptual utiliza, solo, las palabras clave y este puede o no llevar imágenes.
Al final, cada quien decide cual es la mejor opción, dependiendo del caso, para utilizar estas dos grandes herramientas. En lo personal prefiero los mapas conceptuales, debido a que no se dibujar como para realizar un mapa mental.
publicada por: pedro quintana piña 2lc2
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